¿Fan or Foe?

Después del video de Bad Bunny “rechazando” a una fan, necesitamos hacer terapia con ustedes y abrir debate sobre los fans, las cámaras, la invasión de privacidad y por supuesto quiénes nos han hecho creer que la gente famosa está al servicio de uno…los tabloides.

Ojito, el debate es para poder subsanar muchas aristas que nos triggean en este tema.

Arista número 1, solemos olvidar que la gente “famosa” siguen siendo personas de carne y hueso, que tienen emociones, días buenos, días malos, y pueden estar pasando por un montón de cosas a la vez en esa cabecita humana que tienen. Cómo tú y cómo yo.

Deshumanizar a los artistas o celebridades es muy común, creemos que son personas perfectas, robots, o sencillamente creemos que por “hacerlos famosos” tenemos el derecho de tratarlos como queramos.

(Esta última parte, sin duda es gracias a la actitud y trato que les dan los paparazzis y nos han acostumbrado a pensar que así se trata a un ser humano)

Arista número 2, el mundo digital nos suele regalar momentos fuera de contexto y se tenemos el hábito de juzgar ese trocito de momento y “tener opiniones” sobre situaciones y personas desconocidas.

Una foto o un video puede decir mucho, sobre todo si lo sacamos de contexto y si no queremos saber las perspectivas pertinentes involucradas en la foto o video, será más fácil juzgar.

Me refiero a que tomamos como cierto, como un hecho, algo porque “lo podemos ver”, pero la realidad es que sólo vemos una parte.

Arista número 3, es más fácil etiquetar, juzgar, o tener opiniones, que tratar de comprender una situación. Internet nos ha hecho creer que nuestra opinión es oro y que además deberíamos tener una opinión sobre TODO.

(Un poco imposible y absurdo, considerando que no podemos absorber, ni tener, toda la información y conocimiento infinito del universo)

Arista número 4, creemos que la gente famosa no tiene, o no debería tener espacio personal. No me refiero a la privacidad, sino a que, si veo a mi celebridad favorita, tengo el derecho de lanzarme encima de esa persona, o de su auto, por el hecho de ser famosa.

Estas primeras 4 aristas son muy detonantes para nosotros que vemos el trabajo, dedicación y disciplina que le entregan los artistas a sus proyectos.

Por un lado, entregan toda su pasión y emociones en lo que hacen, trabajan todos los días para conectar con sus fans y darles contenido que los haga sentir. Y por otro lado, el desgaste emocional y físico de trabajar duro y ponerle su mayor y mejor esfuerzo a su trabajo, para que los juzguen por UN mal día.

¿Somos fans o somos jueces de la vida y emociones de las personas que admiramos?

¿Somos fans o queremos farandulear?

La razón principal por la que los fans alocados nos triggean miedos y emociones negativas, es porque nosotros hemos tenido la mala fortuna de atender a “fans” que han puesto en peligro la integridad física del equipo de trabajo por querer tener una foto con una celebridad.

Abrimos debate ¿crees que está bien farandulear y perderla por alguien si arriesgas la integridad física de la persona o de otras personas?

Sabemos que no es intencional, y sabemos que esa actitud es el ejemplo que nos han dado los paparazis. Lo cual nos lleva a la arista 5, creemos que esta bien actuar como actúan los paparazzis.

Y si, sabemos que han habido muertes gracias a los paparazzis, pero nuestra disonancia cognitiva nos hace creer que nosotros SI tenemos el derecho de agobiar a estas personas famosas, sin considerar que les podemos joder la vida because “we’re entitle to them”.

Y no, no estamos diciendo que no pidas tu fotito, o que no saludes a esa persona, el debate es la emoción y la actitud con la que nos acercamos a estos seres que admiramos tanto y que nos hacen sentir y conectar como humanos.

Si tú fueras una celebridad ¿cómo te gustaría que se acercaran a ti? ¿Cómo te gustaría que te pidieran una foto? ¿Cómo te gustaría que te trataran en la calle?